Así como está escrito en la Biblia; acontecimientos astronómicos visibles a los habitantes de la tierra que están sucediendo de una forma evidente y acelerada. Las Lunas de Sangre, El Selenelion, la aparición en los cielos de planetas visibles al ojo humano, en el mes de Octubre, la alineación del Sol y los planetas, meteoros, asteroides entre otros. Todo estos acontecimientos nos dan un alerta, que aunque el mundo no creyente no puede percibir el eminente comienzo del final de la humanidad, les atemoriza y sienten curiosidad, pero eso no es suficiente en el mundo espiritual. Lo que Dios ha manifestado a través de Su Hijo es que cada ser humano, crea y deposite su fe en El, le ame y le siga día a día, entregándole su vida a Jesucristo, el Único autorizado por El Padre.
Comentarios